Giorgio Agamben

“IDEA DE LA FELICIDAD

En cada vida hay algo que queda sin ser vivido, al igual que en cada palabra hay algo que permanece inexpresado. El carácter es la oscura potencia que se erige en guardián de esta vida no saboreada: tercamente vigila aquello que nunca ha sido y, sin que tú lo quieras, marca sobre tu rostro una huella. Por ello el niño recién nacido da la sensación de que se parece ya al adulto: en realidad no existe nada igual entre los dos rostros, a no ser aquello que tanto en el segundo como en el primero no ha sido vivido.
La comedia del carácter: en el momento en que la muerte arranca de sus manos aquellos que éstas tenazmente esconden, estrecha sólo una máscara. Es entonces cuando el carácter desaparece: en el rostro del muerto ya no hay huella de lo que no ha sido vivido, las arrugas cavadas por el carácter se distienden. De este modo, la muerte resulta burlada: ella no tiene ojos ni manos para el tesoro de carácter. Esto –lo nunca sido- es captado por la idea de felicidad. Ésta es el bien que la humanidad recibe de manos del carácter.”